¿Para qué cocinar saludable?

"¡No tengo tiempo!" Es el obstáculo que más escucho y más digo. Y con la excusa que tenemos poco tiempo, retrasamos lo más esencial para existir: ¡Alimentarnos bien!

La solución: ¡Agendar tiempo para nosotros! Si queremos tener tiempo para cocinar, habrá que agendarlo, ¿no? Si no hacemos hueco entonces sí, nos faltan horas. Qué se caiga Roma que yo como y ceno. Pero antes, hay que hacer 2 cosas vitales: comprar los alimentos y prepararlos. Ya te daré trucos para rendir más: Cocinar por tandas "batchcooking" organización y planificación, etc..
 
Si eres millonario este post no te va interesar, tienes de sobra dinero para comprar tiempo. Aunque te digo que te pierdes algo único y divertido. Si eres como los mortales como yo y aún no te he convencido, te cuento más. En la cocina transformas los alimentos y "aplicas nutrición". La alimentación es un acto voluntario y educable. La nutrición, en cambio, se ejecuta de manera espontánea sin que tengas que saber nada.  Entonces, qué sencillo es empezar a nutrirse ¡cocinando alimentos de verdad! Darles sabor e invitar a los amigos, reírse, abrazarse, quererse... 

Si eres madre o padre como yo, ya se lo que estás pensando. A veces es imposible tener ese nivel de emoción al cocinar y comer en familia: las obligaciones, tareas, médicos, actividades extraescolares, cansancio acumulado, niños malos comedores o niños con hambre infinita... La comida sana se vuelve un enemigo. Lo sé porque lo vivo. ¿Y si te dijera que se puede cambiar? 

CUÁNDO NOS PONEMOS SERIOS Y BUSCAMOS "LA NUTRICIÓN PERFECTA"

Permíteme decirte que la nutrición es la ciencia más desconocida y cambiante que está en boca de todos. Tanta información confunde. No sabemos qué elegir, nos levantamos con una información por la mañana, nos acostamos con otra. Seguimos a todos los perfiles en instagram "por si nos perdemos algo". Esta confusión genera miedo a elegir, a comer y disfrutar. Terminamos comiendo mal, tirando de suplementos maravillosos sentados delante de un ordenador o acostados en la cama "informándonos más" . Sin actividad física, sin descanso adecuado, es normal que nos desmotivemos. 

¿PARA QUÉ CAMBIAR HÁBITOS ALIMENTICIOS?

Además de mejorar nuestra salud, prevenir la enfermedad, sentirnos bien, etc. seremos capaces de relacionarnos con la comida de manera saludable sin sentirnos culpables las veces que lo hacemos mal. Podemos conseguir bajar de peso sin dietas, recuperarnos de las enfermedades y disminuir el deterioro del paso del tiempo. Si queremos salud, es importante cocinar.

¿Cocinar sano es aburrido? Ojalá dejemos de relacionar que comer sano es sinónimo de enfermo. Porque para cuidarse ¡no hay que cocinar para un enfermo! Incluso hay enfermos que saben cocinar y comen mejor que las personas que se ponen a régimen. No digo más.

Para terminar, quiero remarcar la importancia del legado generacional del que somos responsables. ¿Qué ejemplo somos para nuestros hijos? ¿Quién les educará en hábitos a cuidarse, a cocinar? Estoy convencida que desde el plato y las comidas diarias podemos anclar recuerdos y hábitos de manera muy potente.

¿Te he convencido? 
¿No sabes cocinar? Cocinar se aprende, cocinando. 
¿Qué ya sabes cocinar? Genial. Pues pasamos a otro nivel.
¿Qué estás cansada de cocinar? Le damos otro enfoque más realista que te permita descansar sin tirar todo a la borda.

La Cocina Sana está pensada para:
– Organizar y planificar tus menús equilibrados acorde a tu ritmo.
– Aprender a elegir y manipular alimentos.
–Crear recetas llenas de sabor y simples de repetir.
– Sustituir ingredientes dudosos por otros más sanos. 
– Reducir cantidades de azúcar.
– Reutilizar las sobras ¡Quedan deliciosas!
– Comer delicioso y disfrutar.

En la cocina pasan muchas cosas además de transformar los alimentos, también une, relaja, fomenta y cambia hábitos. Cocinar emociona ¡Es maravillosa!

Te invito a suscribirte a mi newsletter para que no te pierdas ningún receta. También puedes escribirme a paola@lacocinasana.com